Por Matías Bíscaro El miércoles 22 de febrero, la ciudad de Buenos Aires amanecía con una de las peores noticias de los últimos tiempos. Una formación de Trenes de Buenos Aires (TBA), había chocado contra los sistemas de paragolpes que se encuentran al inicio (o final) de los andenes de la Estación Once de la Línea Sarmiento. El resultado de la tragedia, ocurrida a las 8:30 horas aproximadamente, sería de 50 pasajeros muertos y más de 700 heridos. Más allá del dolor de las familias que perdieron seres queridos o del shock al que estaría sometida el resto de la población (incluso en otros países), es de destacar las tareas desarrolladas por el SAME (servicio médico de emergencias de la Ciudad de Buenos Aires), bomberos, Defensa Civil, policías federal y metropolitana, socorristas y médicos y enfermeros de los servicios de urgencia y de los hospitales que recibieron a los heridos y demás personal ferroviario que se encontraba en el lugar. Lo que no se puede destac