Las Redes Sociales Corporativas como medio de continuidad del negocio

Por Tania Rinnebach, en "Zyncro"

 

La información y conocimiento del negocio (políticas, procedimientos, innovaciones, mejores prácticas, etcétera) es uno de los activos más importantes para las organizaciones, a tal grado que existen planes específicos para mantener la funcionalidad de una organización durante una contingencia, a esto se le conoce como BCP (Business Continuity Plan o Plan de Continuidad de Negocio).

Este tipo de programas tienen como objetivo crear y validar planes logísticos para que una organización recupere y restaure sus funciones críticas interrumpidas después de un desastre. Para soportar esto, es necesario que la organización cuente con un sólido sistema de información al cual resulta esencial tener acceso inmediato y desde cualquier lugar, pues de esto depende una gran cantidad de procesos críticos para el negocio.

Las redes sociales corporativas facilitan la implementación de este tipo de planes. El auge del cloud computing o “la nube” de la que dependen también las redes sociales, es una solución sólida para la consulta de información en tiempo real y poder responder casi ante cualquier solicitud interna o del mercado de manera inmediata en una situación de desastre.

Las redes sociales corporativas funcionan en esta dinámica como un sistema de recuperación durante una contingencia, permitiendo a los colaboradores permanecer en contacto con la organización, sin dejar de lado su operación habitual.

Después de la rapidez en la administración y funcionamiento a través del cloud computing y de las redes sociales corporativas, éstas tienen como segundo estandarte de beneficios la seguridad de la información, al generar un histórico de movimientos con cada documento, temporalidad en la vista y control de visibilidad de los mismos.

La utilidad de una red social corporativa como Zyncro va más allá de una cooperación constante entre los colaboradores, también facilita los procesos de recuperación durante una contingencia y ahí radica el compromiso de las organizaciones en su objetivo por instaurar una red social corporativa, donde resulta trascendental destinar tiempo a su mantenimiento y difusión. Es necesario destacar que la participación y cooperación en este tipo de entornos precisa de un estimulo constante para alimentar la red y asegurar un amigable proceso de recuperación del negocio ante cualquier contingencia.