Ir al contenido principal

La ilusión del liderazgo a un click de distancia

 
Con frecuencia, al comenzar mi trabajo con un grupo de ejecutivos en el desarrollo de sus competencias de liderazgo, me encuentro con sus deseos de mejoras rápidas, con anhelos de cambios que, según ellos, deberían provenir de las figuras de máxima autoridad, con fantasías vinculadas a la incorporación casi automática de nuevas perspectivas y habilidades de conducción, con solicitudes de tips que funcionen en forma inmediata, con expectativas de que les provea de fórmulas cuasi mágicas que al aplicarlas a su realidad cotidiana todo funcionaría mejor…

Sin embargo, desconozco la manera de lograr mejoras sin asumir costo alguno. En general, el funcionamiento de un sistema empeora antes de mejorar, así como la optimización del funcionamiento del sistema en su conjunto implica la suboptimización de alguno de sus componentes.

Pero es natural que muchos deseen que las cosas mejoren sin estar dispuestos a salir de sus zonas de comodidad, sin percatarse del precio emocional y de tiempo, de los riesgos, del esfuerzo, dedicación, exposición al ridículo, torpeza, resiliencia, temores, dudas… que en general implica todo proceso de liderazgo, aprendizaje y cambio adaptativo.

Para fijar esta idea, comparto la siguiente historia de liderazgo que encontré en el libro Liderazgo sin límites (Leadership on the line) de Heiftetz y Linsky. La historia es una modificación de Sousan Abadian de “From Wasteland to Homeland: Trauma and the Renewal of Indigenous Communities in North América, publicada en la tesis doctoral que presentó en 1999 en la Universidad de Harvard. Los nombres fueron cambiados para mantener la confidencialidad. Es un poco extenso, pero no dudo que te será grata y valiosa la lectura.

Maggie Brooke se crió en una pequeña reserva indígena norteamericana en la cual casi todos los que eran mayores de 12 años bebían alcohol. Tras dejar la bebida con ventitantos, pasó más de una década conduciendo a su pueblo hacia la salud y sobriedad. Ahora, a los 40 años, como anciana de su tribu y abuela, Maggie recibe en su hogar un flujo incesante de visitantes durante toda la jornada. Una tarde le contó a uno de ellos la historia de Lois, la mujer que la inspiró para intentar hacer algo sobre la dependencia del alcohol entre su gente:
“Hace veinte años solía trabajar de niñera para Lois, que vivía en una zona vecina dentro de nuestra tribu. Una vez por semana caminaba unos kilómetros hasta su comunidad y cuidaba de los hijos de Lois. Pero después de dos meses empecé a preguntarme qué podría estar haciendo Lois cada martes por la noche. Entonces, en esas aldeas no había mucho que hacer. De modo que una tarde, después de que Lois se fuese, vestí a los niños y fuimos a la choza para averiguar lo que estaba haciendo. Miramos en la tienda a través de una ventana y vimos un círculo de sillas, todo perfectamente organizado, con Lois sentada en una silla completamente sola. Los asientos del círculo estaban vacíos.

Sentí una gran curiosidad, ¿sabe?. Por eso, cuando Lois volvió a su hogar esa noche, le pregunté: “Lois, ¿qué haces cada martes por la noche?”. Y ella respondió: “Creía que te lo había dicho hace semanas; he asistido a varias reuniones de AA (Alcohólicos Anónimos)”. Volví a preguntarle: “¿Qué significa que has asistido a reuniones? Esta noche pasé por allí con los niños y miré a través de la ventana. Te vi sentada en ese círculo de sillas y completamente sola”.

Lois parecía tranquila. “No estaba sola”, dijo. “Estaba allí con los espíritus y los ancestros; y un día nuestra gente vendrá.”

Lois nunca renunció. “Cada semana colocaba esas sillas en un círculo y durante dos horas simplemente se sentaba allí.

Durante mucho tiempo nadie acudió a esas reuniones, e incluso después de tres años sólo había unas pocas personas en la tienda. Pero diez años más tarde el lugar estaba repleto de gente. La comunidad empezó a transformarse. Las personas empezaron a apartarse del alcohol. Me sentí tan inspirada por Lois que ya no podía sentarme y ver cómo nos envenenábamos.”
Lois y después Maggie dejaron la bebida, y luego desafiaron a sus amigos, familiares y vecinos a cambiar y renovar sus vidas. Liderar estas comunidades requería un extraordinario examen de conciencia, perseverancia y coraje. En su historia nativa abundaban los líderes y algunos de ellos, con buena fe, habían obligado a las tribus a renunciar a sus costumbres familiares y fiables, y ahora a estas comunidades se les pedía cambiar nuevamente, sin razones para pensar que las cosas llegarían a ser mucho mejores.

Lois y Maggie estaban pidiendo a la gente que afrontara el cambio que discurre desde el estremecedor consuelo del alcohol y el gran esfuerzo de renovar sus vidas diariamente. No habría progreso hasta que dejaran atrás su dependencia del alcohol. Pero a la tribu le resultaba extremadamente difícil renunciar a su estilo de vida, especialmente por una idea intangible acerca de su futuro. Se habían opuesto antes cuando otros les habían obligado a cambiar sus estilos de vida, y combatieron a Lois y Maggie.

Las dos mujeres fueron ridiculizadas y marginadas. Pasaron años sintiéndose fuera de lugar en sus propias comunidades, mal recibidas en las reuniones y encuentros donde fluía el alcohol, tan excluidas que incluso las fiestas llegaron a ser acontecimientos tristes y solitarios para ellas. De hecho, durante mucho tiempo pasaron los fines de semana fuera de la reserva para así encontrar personas con quienes poder hablar. Se habían arriesgado y también arriesgaron sus relaciones con los vecinos, los amigos y la familia. Finalmente, tuvieron éxito y sobrevivieron. Pero durante mucho tiempo no imaginaron que lo tendrían. Pudieron haberlo perdido todo.

Así que si quieres ser líder, entonces asume el costo que esto implica y persevera, que tal vez, luego de invertir algunos años de dedicación continua, de avances y retrocesos, de dudas y tentaciones, logres tu cometido…

Selección realizada por Andrés Ubierna

Comentarios

Entradas populares de este blog

Encuesta exclusiva: los 5 temas que más alimentan la "grieta" en Argentina

  Un estudio analizó la conversación en Twitter en los últimos cinco años. Sólo Brasil supera a nuestro país en polarización. Emilia Vexler, en "Clarín".- El concepto de "grieta" es aplicable a casi todo en Argentina. Hace tiempo que dejó de pertenecer al mundo de la política, ya es parte de la conversación social. Pero en las redes la polarización está en su ecosistema natural. Se mueve como quiere en el discurso público. Se repite. Se multiplica. En un estudio llamado The Hidden Drug (La droga oculta), realizado por la compañía de consultoría de comunicación y marketing digital LLYC, se identifican los temas más calientes y se hace foco en el poder adictivo de la polarización. El informe bucea en las redes sociales para explicar la evolución de este fenómeno en Argentina en los últimos cinco años, al igual que sucede en Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Estados Unidos, España, México, Panamá, Perú, Portugal y República Dominicana. La referencia es la conversación

Radiografía del consumo de medios de los jóvenes en Argentina

Publicado en "TotalMedios" “Los jóvenes, un público exigente”, es el título de la nueva investigación del departamento de research de Anunciar. Entre las conclusiones: son grandes consumidores de internet y televisión. Y utilizan de manera indistinta estos medios para entretenerse e informarse. El departamento de research de  Anunciar  desarrolló una investigación sobre el consumo de medios de los jóvenes en Argentina. Entre las conclusiones: son grandes consumidores de internet y televisión y utilizan de manera indistinta estos medios para entretenerse e informarse. El cuidado del medio ambiente y la equidad de género son temáticas instaladas en la sociedad y los jóvenes no son ajenos a ellos. Se diferencian en el interés por la vida social. Además tienen alta afinidad a las redes sociales y a los servicios de streaming como Netflix y Spotify. Los jóvenes acceden a diarios en busca de información. Los jóvenes son influenciados por la publicidad prin

La semana de los Trolls

Por  "laaprendiz " (Bolg propio)     Un troll es la peor pesadilla de un community manager. Si no sabes gestionarlo, te puede arruinar tu reputación profesional y la de la marca que gestionas. Por ese motivo, he decidido dedicar esta semana a esas criaturas que pueblan nuestros territorios y nos amenazan. Así pues, desenvainad las espadas, pulid vuestros yelmos y encomendaros a vuestros dioses.  ¡Bienvenidos a la semana de los trolls! Aspecto de un troll Un troll no debe confundirse, en un primer momento, con un usuario enfadado o molesto con la marca que gestionamos. La principal característica de un troll es que nunca será aplacado con una respuesta satisfactoria en forma de disculpa o solución a un problema . ¡Para nada! Sus principales características son: Provocador. Va a intentar por todos los medios provocar el enfrentamiento con el community manager o con otros usuarios a través de sus comentarios. Y ni que decir tiene que sus