La gestión del militante
Santiago Álvarez es cuestionada por los periodistas de la propia agencia
por la "censura" de temas incómodos y el uso de "comisarios políticos"
en la redacción
Este
mes se cumple un año desde que la agrupación kirchnerista La Cámpora se
hizo cargo del control de la agencia estatal de noticias Télam , con la conducción de Santiago Álvarez, uno de sus militantes.
Y el balance hasta ahora es muy cuestionado,
especialmente por periodistas de la propia agencia, que critican las
restricciones impuestas, las omisiones de temas incómodos, la
eliminación de las opiniones de políticos opuestos al Gobierno y la
utilización de los textos para atacar a opositores.
El control de los contenidos en la agencia no es ninguna novedad. Sin embargo, todas las fuentes de la redacción consultadas por LA NACION, que pidieron anonimato, indicaron que la actual dirección llevó esta práctica a un extremo desconocido: las restricciones y la consulta a las autoridades políticas son "permanentes". Estos procedimientos los obliga muchas veces a retrasar la emisión de una información, "hasta que se consulte al funcionario que entiende el tema". LA NACION intentó hablar con las autoridades de la agencia sobre estos cuestionamientos, pero no obtuvo respuesta.
"Patucho", como se conoce a Álvarez en los ambientes militantes, fue antes de asumir el cargo el responsable del servicio de noticias de la TV Pública. Había saltado a la fama durante el conflicto con el campo, en 2008, por su blog Un Día Peronista y dirigió el suplemento juvenil del diario oficialista Miradas Al Sur.
El desembarco de los jóvenes kirchneristas ya se había iniciado con la dirección de Martín García, designado en octubre de 2010 y desplazado el año pasado por el joven militante. Con su llegada, Álvarez descabezó al directorio y a la gerencia. Pero, contrario al temor de muchos empleados, los militantes "no entraron en tropel" a la redacción, según señala un periodista con responsabilidades jerárquicas. "En Canal 7 habían llegado con soberbia y tuvieron muchos problemas. Evitaron cometer los mismos errores en un espacio mucho más complicado como Télam", apunta esta misma fuente.
La prioridad fue controlar los puestos de mando y la mesa de edición, filtro final de las noticias. Fabián "Conu" Rodríguez, militante de La Cámpora y bloguero K, está a cargo de la gerencia periodística desde agosto de 2012. Es quien "recorta párrafos incómodos o manda noticias al tacho", dicen en la agencia.
Según los periodistas de Télam consultados, los tres funcionarios con mayor influencia son el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, y, en temas económicos, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido. Entre ellos existen pugnas por espacios de poder, que se reflejaron en los últimos cambios de la cúpula.
Un grupo de periodistas de la agencia decidió crear una cuenta de Twitter, @Telamparatodos , para informar que "los camporistas, a diferencia de las anteriores gestiones, casi no permiten que se emitan cables con el pensamiento de los opositores", algo que les molesta "por el permanente discurso oficial en favor de la pluralidad de voces".
También indicaron que Álvarez cuenta con "comisarios políticos" en la redacción: "Se desempeñan en puestos de edición de política, economía o de la Web". Un empleado aseguró que "los comisarios" son los encargados de realizar las "notas resistidas por los periodistas con trayectoria".
Otra cuestión que despertó críticas es el ataque a gestiones opuestas al Gobierno. El narcotráfico en Santa Fe o la polémica por las antenas de TDA en Córdoba generaron un gran número de cables. Pero este despliegue informativo contrastó con la cobertura de temas incómodos. El #22F fue una muestra del estilo de la agencia. En los cables sobre el acto por la tragedia de Once, Télam evitó dar precisiones sobre las críticas al Gobierno. Ayer en la cobertura del discurso del presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti se omitieron los comentarios espinosos.
Martín Becerra, especialista en comunicación, opinó que "en todos los medios, ante una información que choca con su intereses, se puede presentar la noticia de una forma menos ostensible. Pero una cosa es sazonar editorialmente y otra eludir la existencia de la misma cuando, por ejemplo, involucra al vicepresidente".
Adriana Amado Suárez, presidenta del Centro para la Información Ciudadana, indicó que las omisiones "son una cuestión que afecta a los ciudadanos, que tienen el derecho a contar con información de calidad".
El militante K que hoy dirige la agencia estatal
Santiago Álvarez, presidente de Télam y militante K.
- Santiago Álvarez
Presidente de Télam
"Patucho", apodo que comparte con su padre, tiene 32 años. Se hizo conocido durante el conflicto con el campo por su blog oficialista " Un Día Peronista ". Milita en La Cámpora y dirigió el suplemento Ni a Palos, del diario Miradas al Sur. Llegó a la función pública con el cargo de director de noticias de la TV Pública
Télam para todos (y todas)
Un grupo de empleados decidió abrir una cuenta en Twitter para contar intimidades de la redacción de la agencia- @Telamparatodos : el cable de Télam sobre Once habla de un duro comunicado leído en el acto pero omite publicar el contenido!
- @Telamparatodos : tal vez Abal Medina pueda este año trasladar su oficina a la agencia así no hay tanta demora en la aprobación de cables
- @Telamparatodos : Télam está lleno de buenos periodistas. Pero también tenemos malos y como editores. Más que periodistas son comisarios políticos
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